Fantasía erótica de miles de hombres en todo el planeta, fetiche sexual de decenas de actores porno durante la década de los dos mil, la considerada una de las actrices del cine para adultos más importantes y atractivas de la historia, Jenna Jameson, vive un auténtico calvario. La ex estrella del cine porno acaba de revelar que fue diagnosticada con el síndrome de Guillain-Barre, una enfermedad muy rara que le impide caminar. Jameson confiesa sufrir vómitos continuos, así como problemas para poder permanecer de pie. Además, asegura que desde hace varias semanas los dolores son tan intensos que no puede caminar. Su pareja, Lior Bitton, fue quien informo a los millones de seguidores que tienen la estrella en Facebook e Instagram de tan terrible noticia.
Una enfermedad extraña y dolorosa, pero con buen pronóstico
La otrora estrella del porno y empresaria de negocios de esta índole como los chats de sexo en vivo, como se explicó, padece el denominado síndrome de Guillain-Barre. Una enfermedad que afecta al sistema nervioso central provocando problemas graves como la parálisis progresiva de los músculos. La afección se da por qué el sistema inmunitario (las defensas que tienen nuestro organismo) ataca al sistema nervioso periférico por error. Con el paso de las semanas, los continuos ataques del sistema inmunitario al sistema nervioso generan que los músculos se vayan inflamando hasta provocar la parálisis de los mismos. Los nervios terminan por no poder enviar las señales a los músculos mientras que estos son incapaces de responder a las órdenes del encéfalo (el centro de control de los movimientos en los vertebrados) Además, otros síntomas propios del síndrome Guillain-Barre son la incapacidad de sentir calor, dolor y otras sensaciones. En el caso de Jenna Jameson los síntomas que la estrella sufre son los siguientes: imposibilidad para caminar o levantarse, vómitos continuos y fuertes dolores en los pies. Por suerte para la pornstar, el pronóstico de esta dolencia es bastante bueno. Se estima que más del 90% de los pacientes que lo sufren se recuperan totalmente al cabo de un año.
Un breve resumen de la vida de la reina del porno
Jenna Marie Massoli es el verdadero nombre de la considerada reina del porno. Jenna Jameson (47) nació en el seno de una familia desestructura de Las Vegas, Nevada. Su padre era un policía con graves problemas de alcoholismo que a duras penas llegaba a pagar las facturas. Su madre había fallecido por un cáncer cuando Jameson solo tenía dos años. Debido a la ausencia de su madre y al alcoholismo de su padre, los inicios de la futura estrella del porno fueron muy complicados. Durante su adolescencia tuvo que malvivir junto a su padre en una autocarabana. En esta primera etapa de su vida, dada su excepcional belleza comenzó a participar en diferentes concursos de modelaje para adolescentes. Estos pequeños pasos en el mundo de la moda ayudaron a Jameson a sobrevivir. Sin embargo, su atractivo físico también le causó momentos de su vida que la pornstar desearía olvidar.
La actriz, modelo y empresaria del erotismo (cine, chat de sexo en vivo, juguetes sexuales…) fue víctima de una violación grupal con solo 16 años. Además, el tío de su novio abuso reiteradamente de ella durante su adolescencia. Por si no fuera suficiente, durante sus años como estríper en la ciudad de Las Vegas, Jameson, acabo siendo víctima de las drogas. La reina del porno se hizo adicta al LSD y las metanfetaminas llegando a perder más de 20 kilos, lo que le hizo perder su trabajo como modelo y como estríper. A comienzos de 1993, con Jenna en silla de ruedas, su padre decide acogerla de nuevo en su casa e ingresarla en una clínica de desintoxicación. Tras superar sus adicciones, consciente de todo el dinero que había ganado durante su trabajo como estríper, Jenna regresa a Las Vegas para ser la estrella de algunos de los mejores clubes de la ciudad. En cuestión de unos meses, Jenna Jameson ya era una de las estríper más importantes de Las Vegas cobrando hasta 2000 dólares por actuación.
Jenna Jameson era una mujer deslumbrante. Una chica con una figura física espectacular y un rostro hermoso y provocador. Obviamente, estos atributos físicos no pasaron desapercibidos y durante su etapa como estríper también poso desnuda para revistas X como Penthouse o Hustler. En 1993 la norteamericana rodó su primera escena de contenido para adultos. En este preciso instante fue cuando cambio su apellido por el de la marca de su whiskey preferido (Jameson). Al igual que su carrera como estríper su paso por el cine porno se caracterizó por un ascenso meteórico. Para 1995 la actriz ya era una de las más populares y mejor pagadas de la industria del cine erótico. Desde 1991 hasta 2011 Jameson protagonizo algo más de 200 créditos, un número bastante exiguo para tan amplio espacio de tiempo. Sin embargo, todas las películas en las que participo la estrella fueron de alto presupuesto. Escenas con los actores y directores más importantes, así como con los mejores medios que había por aquel entonces.
Durante el cenit de su carrera la actriz llego a cobrar hasta 350.000 dólares por película. Tan solo pornstars como Tracy Lords o Julia Ann tenido un caché similar a lo largo de la historia del cine X. En aquellos tiempos, los mejores actores masculinos ni tan siquiera llegaban a los 100.000 dólares. Incluso, en la actualidad muy pocas actrices y modelos de los chats de sexo en vivo aspiran a cobrar semejantes cifras. Consciente de que el físico no es eterno y que otras actrices venían pisando fuerte desde abajo, en el año 2000 Jenna funda su propia compañía denominada ClubJena. Una empresa que se dedicaba a proveer películas y videos X, fotos eróticas, chats de sexo en vivo y asesoramiento sexual a sus clientes. Varios años después Playboy la compró por una cantidad millonaria que no se hizo pública. En 2008 se retiró de la industria. Denominada “La reina del porno”, Jenna mantiene una relación estable con Bitton, padre de su hija Batel, de 4 años.