Tras analizar diferentes estudios sobre las preferencias sexuales de las mujeres, casi todas ellas prefieren no hacer determinadas posiciones que casi todos los hombres piden, las cuales son detestadas en algunos de los casos. A continuación os descubrimos cuáles son y porqué, te llevarás más de una sorpresa. Lo sentimos si alguna de ellas es de tus preferidas, pero es la realidad. Habrá que intentarlo de otra manera.
Sabemos que esta es una de vuestras preferidas, tenéis una primera vista del culo que os encanta pero, al parecer, para ella esto no es del todo agradable. Quizás sea porque se encuentra en un estado sumiso, en el que el hombre es quien manda y lleva el dominio de la situación, pero os aseguramos que a muchas mujeres, aunque no sea la gran mayoría también les pone mucho, ya que es una de las mejores maneras de llegar al punto G si no estáis realizando sexo anal.
Aunque parezca increíble, una de las posturas más practicadas a la hora de tener relaciones sexuales es la que menos gusta a las mujeres. La verdad es que dice poco de ellas, si llevan soportándola durante toda la vida y no habían dicho nada hasta ahora. Cuantos niños habrán venido al mundo gracias a esta postura, y ahora resulta que estaban sufriendo durante el sexo. Parece ser que son más innovadoras, porque si no les gusta esto…
Parece mentira, pero es otra de las posturas por las que les cuesta más pasar a casi todas las chicas. Una de las mayores ventajas que tienen las chicas en esta posición es que son ellas quienes dominan la situación. Quizás el odio que sienten muchas mujeres hacia esta postura sea que para los muslos es algo doloroso mantenerse abierta de piernas y moviéndose continuamente.
Esta es otra versión de la anterior, pero en lugar de colocarse cara a cara frente al hombre, se realiza de espaldas a él. Puede ser que mantenga similitudes con el perrito y una de las causas principales de su odio hacia esta posición es que no ven la cara de la pareja sexual y sientan algo de complejo al sentirse de nuevo sumisas durante el acto. También por la posición del pene puede ser algo doloroso, ya que entra con mucha más facilidad y esto puede hacer que el dolor aumente a medida que su cuerpo se mueve.
Si, ya sabemos que es una de vuestras preferidas, pero la razón por la que muchas de ellas no quieren realizarla no es por falta de ganas, sino que les cuesta mucho concentrarse en dar y recibir placer al mismo tiempo, ya que además es una postura algo impersonal, ya que no hay cruce de miradas ni nada por parte de ninguno, y muchas de ellas buscan en algunos casos veros los ojos mientras les estáis haciendo un cunnilingus.