Estamos de nuevo con la segunda parte de las mentiras que ocurren a diario en las películas para adultos y que muchas personas creen y conllevan a inseguridades de muchos de sus seguidores.
A continuación, seguimos desvelando las mentiras más comunes de las películas X:
A todos nos gusta el sexo salvaje: En este tipo de películas podemos ver escenas en las que se practica sexo duro o hard sex, lo que sería sexo violento y realmente agresivo. En general, a casi todo el mundo en la cama le gusta que le traten con sutileza y dulzura a la hora de practicar sexo. Como mucho te gusta que sea intenso y fogoso, pero lo de violento queda para unos pocos atrevidos.
Todos tienen juguetes sexuales: En casi todas las películas aparecen accesorios fetichistas como lencería erótica, disfraces o consoladores. En realidad, no todo el mundo practica ese tipo de acciones ni tiene un juguete sexual, sino que se dedican simplemente a practicar sexo con tan solo sus cuerpos.
Es muy fácil hacer un trío: En muchas películas aparece una persona entrando en una habitación en donde se encuentra a la que es su pareja y otra practicando sexo, y en vez de regañarle, se une a la acción y todos lo hacen juntos. Lo más probable es que si esto ocurriera en la realidad, a ambos les faltaría tiempo para salir corriendo.
Los gays y las lesbianas son muy masculinos: El porno para homosexuales, sobre todo el de chicos, utiliza hombres muy musculosos, bien dotados y masculinos. Esto no ocurre en la realidad, ya que existen hombres gays que son algo más femeninos o no están tan buenos como se nos presentan en estas películas. El cine porno con mujeres supuestamente lesbianas está dirigido expresamente a un público de hombres, a los que les da morbo ver como dos o más mujeres tienen sexo. Además, una de las dos siempre coge el rol de activo, mientras la otra hace de pasiva, cuando esto en la realidad no ocurre nunca así.
Todos los repartidores que llaman a tu puerta son amantes sexuales: Son muchísimas las veces que hemos visto como un fontanero, butanero, o hasta el repartidor de pizza llama una casa y termina en el sofá o en la propia cama acostándose con la mujer de la misma. Además, todos tienen cuerpos atléticos y un físico muy llamativo. Cómo podemos comprender, esto es algo que podría pasar, quien sabe, pero es totalmente algo imaginario que es muy poco probable que ocurra.